lunes, 13 de mayo de 2013

Sobre el Estudiar y el Estudiante. José Ortega y Gasset


José Ortega y Gasset
Sobre el Estudiar y el Estudiante.
El texto habla sobre la ciencia filosofía y tecnología. Empieza diciendo que una ciencia no es precisamente tal ciencia, sino más bien, para quien la busca afanoso, en fin que la metafísica no es precisamente metafísica sino es para quien la necesita.
También nos damos cuenta  que el estudiante es un ser humano masculino o/y femenino, a quien la vida se le impone la necesidad de estudiar las ciencias del conocimiento, de las cuales el no ha sentido la necesidad de saber, los que crearon un saber es porque lo sintieron, no precisamente el saber el saber, sino más bien el concretismo de saber tal cosa. El estudiante presente a la ciencia es opuesta a la que ante esta tubo su creador, primero siente una necesidad vital y no precisamente  científica y esto lo llevo a buscar una satisfacción y al encontrarla en ciertas ideas resulto que estas eran la ciencia ya hecha como una serranía que se le levanta ante él  y el cierra su camino vital.  
No  es el deseo el que lleva precisamente el saber sino más bien  la necesidad, el deseo no existe sin  antes no existe la cosa deseada. El que solo tiene que estudiar y el que siente la necesidad de ella,  aquel que no tendrá al no hacerse cuestión de todo contenido de la ciencia,  a no criticarla al contrario tendrá a reconfortarse pensando que el contenido de la ciencia ya hecha tiene un definitivo valor es la pura verdad, lo tendrá que someter a la crítica, con el pensamiento de que no es verdad, ya que,  necesita un saber con radical y procurara deshacer el que se presenta como ya terminado. Las personas  así son los que están constantemente corrigiendo,  renuevan o recrean la ciencia.
Y aunque no hubiese estudio ni ciencia, por sí mismos y solos inventarían mejor o peor; dedicarían la mayor parte de  esfuerzo a investigar. El ser estudiante es verse  obligado a interesarse directamente por lo que no le importa o le interesa muy poco. Él estudiante decide estudiar ciencias o letras y esto implica una predeterminación de su espíritu, un conocimiento menos vago y no impuesto de fuera.    
Cuando nos dice que la curiosidad nos invita a la ciencia o hablamos de  aquella preocupación nombrada “necesidad inmediata y autóctona” o nos referimos al mal uso de curiosear, esto no puede servir para ser un científico. Lo importante es que el estudiante no siente directa la necesidad de saber sobre la ciencia y, sin embargo, se tiene que ver forzado a ocuparse de ella. Esto quiere decir ya la falsedad de estudiar; unos hombres dedicaron gran parte de su vida a crear la ciencia, se crea así ya una necesidad muerta y un falso y sin sentido hacer.
El ser hombre no es el simple hecho de ser o lo que sería igual no es hacer cualquier cosa solo por hacer, sino más bien ser lo que irremediablemente se es. Ser estudiante es como si se contribuye, es algo “artificial” que el ser humano  se ve obligado a hacer. El estudiante no es estudiar  y si estudia poniendo solo su mejor  voluntad no aprende lo que debiera  y si el estudiante no aprende es porque ya el profesor no podría decir que enseña o más bien que ya no satisface las necesidades del estudiante. Estudiar y ser estudiante sobre todo hoy en día es una necesidad del hombre. Si por cualquier circunstancia una sola generación dejara de estudiar la humanidad actual en sus nueve decimas partes moriría fulminantemente.   
Enseñar no es solo lo básico como primaria y fundamentalmente sino enseñas la necesidad de una ciencia, la curiosidad de saber algo y no enseñar la ciencia cuya necesidad, se imposible hace sentir al estudiante.